Existe una unidad de alimentación que se encarga de enviar energía al resto de los instrumentos que formen la instalación domótica. Normalmente esta unidad es única, aprovechando que tiene unas cuantas horas de batería autónoma en el caso de un corte de luz, pero para mayor seguridad, puede duplicarse con una segunda unidad.
Esta unidad consta de una fuente de alimentación, un elemento que supervisa la alimentación y un recargador de baterías.